Mi perro de acogida tiene miedo a muchas cosas. ¿Qué puede ayudarle?
Es una situación muy común. El problema fundamental con un perro procedente del extranjero es que no sabemos nada de su historia. El miedo excesivo o un pánico puede deberse a la falta de experiencia, a experiencias traumáticas o a una mezcla de ambas. Si imaginamos la vida del perro antes de llegar a Alemania, debemos tener en cuenta que las condiciones de los refugios en el extranjero suelen ser diferentes de las que conocemos de los perros aquí en Alemania. Rara vez se les saca a pasear, los refugios suelen estar situados en zonas remotas y los perros casi nunca tienen acceso a un espacio al aire libre. A menudo están encerrados en la misma perrera día y noche. Además, suele haber pocos cuidadores para demasiados perros, por lo que tienen poco contacto con los humanos. Si los perros han crecido en un refugio, suelen tener un déficit de socialización. Al llegar a una ciudad alemana (o incluso a un pueblo), todo es nuevo y aterrador para nuestros nuevos amigos de cuatro patas. La paciencia es esencial para establecer un vínculo sólido. Esto puede llevar semanas o incluso meses. Puedes mejorar el vínculo, por ejemplo, con lo que yo llamo "paseos por la naturaleza". En lugares apartados, como el bosque, y "anticíclicos", por ejemplo a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde, puede resultar más fácil para el perro y para ti reforzar el vínculo. Como norma general, debes introducir a tu perro en cosas nuevas muy lentamente. Si lo presionas continuamente, puede perder la confianza cuando lo saques a pasear y, en el peor de los casos, negarse por completo a salir. Si tienes la sensación de que la ansiedad de tu perro empeora en lugar de mejorar en los primeros días o semanas, lo mejor es buscar ayuda profesional. No te preocupes: muchos animales, rescatados o no, presentan este tipo de "problemas"; los expertos no juzgan, proporcionan consejos prácticos.