Jake, un golden retriever, padece artrosis. Los días fríos y húmedos le resultan especialmente molestos. En estos días, no camina bien y no tiene ganas de moverse. Hoy, sin embargo, entra por la puerta de la consulta moviendo alegremente el rabo. Jake tenía su primera cita con el fisioterapeuta tras la operación de ligamento cruzado. El veterinario había remitido a Jake a la fisioterapeuta Lea Volkmann. El ligamento cruzado se ha curado bien, pero Jake sigue acudiendo a terapia. "Ahora hacemos sobre todo terapia manual con Jake", explica Lea Volkmann. Se nota que le gusta porque salta directamente al sofá. "Movemos una vez cada parte de su cuerpo, buscamos tensiones y desalineaciones y las corregimos si es necesario", explica la fisioterapeuta.
El equilibrio perfecto
29 de diciembre de 2023 — de Birka Kallenbach
¿En qué consiste una buena colaboración entre un veterinario y un fisioterapeuta de animales? ¿Cuándo es el momento adecuado para llevar a su amigo de cuatro patas a fisioterapia?
La fisioterapeuta Lea Volkmann trabajando con el golden retriever Jake
Jake ha sido un caso clásico de fisioterapia. "Tiene mucho sentido hacer fisioterapia con el perro, sobre todo después de una operación", explica Jennifer Rohloff, la veterinaria de Jake. ¿Por qué no basta con una simple revisión en la consulta del veterinario? "Tenemos mucho menos tiempo que los fisioterapeutas especializados", dice la veterinaria. "Claro que también podría comprobar cómo camina el perro y hacer ejercicios con él, pero entonces tendría que reservar mucho más tiempo y podría tratar a menos pacientes al día. En la consulta, el horario es mucho más apretado, también hay urgencias... Aunque la aclaración médica es muy importante, la fisioterapia es el acompañamiento perfecto después de una operación." Según la veterinaria, la fisioterapia es especialmente importante si había dolor antes de la operación, ya que el perro puede haber adoptado una postura protectora, lo que probablemente aumentará la tensión en la parte afectada del cuerpo después de la operación. Esto puede provocar una mala postura, tensión y una recuperación más lenta.
Entonces, ¿solo se recomienda la fisioterapia después de una operación?
No, dice la terapeuta. "También puede ser una buena idea llevar al perro a una clínica de fisioterapia como medida preventiva. Allí, por ejemplo, examinamos el modo de andar del perro. Con frecuencia oímos decir: "Siempre ha andado así". Pero incluso si un perro siempre ha caminado de forma un poco extraña, merece la pena consultarnos. A menudo, los ejercicios específicos y la terapia manual pueden mejorar mucho las cosas". Esto también se aplica a las predisposiciones específicas de cada raza, añade. Por eso, por ejemplo, Hovawart Ketan también es paciente de la consulta. Al ser una raza grande, sus caderas y otras articulaciones son especialmente sensibles. Por eso acude a sesiones de hidroterapia en la cinta subacuática. Aquí, Lea Volkmann y su colega Susann Schauerte vigilan a Ketan para asegurarse de que camina correctamente. Comprueban que distribuye su peso uniformemente, sin "arrastrar los pies", levantando las patas correctamente. De este modo se fortalecen los músculos y se consigue que camine de forma más uniforme en la vida diaria, evitando así el dolor, incluso a largo plazo.
Encontrar la consulta adecuada
El reto a la hora de buscar una consulta de fisioterapia adecuada es reconocer si son expertos, ya que el título profesional no está regulado oficialmente. "Creo que los conocimientos médicos básicos son muy importantes", dice la veterinaria Rohloff. "Ya he tenido casos en los que una fisioterapeuta con conocimientos médicos me ha pedido que confirme lo que ha dicho su colega u otro veterinario". Según Rohloff, este es otro punto importante: la cooperación entre el veterinario y el fisioterapeuta. "Si no nos vemos como competidores y trabajamos juntos, el tratamiento es más eficaz", añade. El fisioterapeuta lo corrobora: "La cooperación con la consulta veterinaria es muy importante: que yo pueda enviar allí a alguien que se tome en serio mis conocimientos y, si es necesario, discuta conmigo el tratamiento posterior".
Preguntamos a la fisioterapeuta qué otras características debe tener una fisioterapia seria y bien fundamentada.
Sus respuestas:
- Al principio, una consulta con anamnesis detallada. Se evalúa al paciente y se analiza el patrón de la marcha. Después de las operaciones, siempre es de gran ayuda ver las radiografías.
- El paciente debe ser examinado a fondo antes de iniciar el tratamiento, por ejemplo antes de meterse en el agua.
- También es importante el conocimiento de la terapia manual, ya que los medios auxiliares como el láser y similares son solo ayudas. Siempre deben ir acompañados de terapia manual.
- Deberes. Es una parte importante de la fisioterapia, ya que implica a los propietarios y garantiza que el programa de entrenamiento se lleve a cabo con regularidad.
